Tumores Medulares
Tumores Medulares
Se trata de una patología relativamente infrecuente pero con una incidencia importante en el mundo neuroquirúrgico.
Podemos distinguir entre los tumores intrarraquídeos pero extramedulares como el meningioma, u otros tumores óseos y los propiamente intramedulares o a nivel de la cola de caballo.
La médula es una estructura nerviosa extremadamente sensible y delicada. En la mayoría de los casos es posible la resección completa del tumor pero en los intramedulares, especialmente, la resección deberá realizarse con extremo cuidado ya que las secuelas pueden ser de extraordinaria gravedad como la aparición de paraplejias o incluso tetraplejias. La habilidad quirúrgica en el manejo de estas delicadas estructuras marcará la diferencia entre un buen resultado con pocas o ninguna secuela, o los postoperatorios muy complicados.
En general, los resultados de estas cirugías son mejores de lo que cabría pensar por lo que una extirpación radical es el objetivo a tener en cuenta.
La incidencia de tumores medulares verdaderamente malignos es baja en comparación con el resto, lo que le da una perspectiva esperanzadora al tratamiento de este tipo de lesiones antaño poco manejables.
La neuromonitorización es imprescindible para que el cirujano pueda disponer de la información funcional durante la resección quirúrgica.
